Cuando llegó la mala suerte yo aprendí a tragar cristal. Todo el cristal del mundo. Incluido el que reflejaba mi vida.
Por eso, desde hace siete años cada cuatro meses tengo pesadillas durante trece días seguidos con una niña muda que se momifica con tiritas.
Me despierto con sal en los ojos, se me abren las cicatrices y entonces le grito a la pared todo lo que jamás te gritaré a ti ni a tu sombra.
Ni siquiera a tu tumba.
A mí también me pasa. Pero en mi caso en lugar de tiritas se momifica con papel higiénico. Te entiendo.
ResponderEliminarHummm, interresante imagen, idea, la de tragarte los cristales sobretodo los que reflejan tu vida; y si no procedes con las paredes es porque no se puede ver nada en ellas, las paredes; o será que no devuelven las verdades, los insultos, hummm... He visto en tanatorios puñetazos a una pared; se me quedó grabado, ya ves; pero en realidad nunca he llegado a entenderlo; la exhibición de sentimientos así; el dolor, la impotencia, lo que quiera que sea que les lleva a mirar o no mirar y golpear la pared... hummmm... pero bueno, imagino que es normal que te preocupes por esa chica y sus tiritas; porque amos, en el fondo lo que hace, lo que es preocupantes es poner algo más llamativo, una distracción del que no todo va bien, hummm, o así lo veo yo, que a veces me parece un error apropiarse de los personajes e historias ajenos jajaaj... pero otras veces no, es lo que tiene...
ResponderEliminarThirteen es una edad muuu mala mu mala
besos de me alegra que no consiguieras quien cortara mi cabeza; apenas la tengo sujeta al cuerpo XD
La sal es lo peor para el dolor y los cristales no dejan cicatrizar...
ResponderEliminarMe ha encantado :)
Un beso ^^
otro motivo más para odiar el número 13.
ResponderEliminarSalvaguardando el mito.
ResponderEliminarMe has captado, Salomé, sólo te pido que sea rápido y sin dolor, hubo un tiempo en el que realmente aprecié mi cabeza.
PD: Me gusta Madame Duras, lástima que es tan poco conocida en España.
Pues ya va siendo hora de dejar de tragar cristales...
ResponderEliminarGrita hasta que se te pasen las ganas, y luego olvida.
Un beso de buena suerte.
Odio el 13....
ResponderEliminarSaludos y un abrazo.
¡Olé! Muchísimas felicidades, escribes maravillosamente bien, encanto.
ResponderEliminarMis mejores vibras :D
Mi otro blog dejo de ser privado, fue solo algo pasajero
ResponderEliminares cierto que la sal es lo peor para el dolor, para las heridas, y tambien es cierto que a veces nuestras caricias no dejan mas que sal...
ResponderEliminar