...Recuerdas cuando me decías que yo para ti representaba el final del miedo, el retorno, el cuerpo, como una tinaja con asideros o una lejana nube, ave de agüeros absolutos, penumbras en otoño, encendida carne, sonrisas en tus ingles, mano presentida que te hacía necesario a la que incluso en momentos de odio y premonición de homicidio, bajo el maquillaje de los días, hubieras querido retener porque, ¿quién, quién no teme perder incluso lo que no quiere? Eres una muchacha roja pero escribiste mucho tiempo en azul. Lejana pero tierna en el recuerdo. Ahora vas a exigirme que te recuerde antes que de que fueras otra persona, una extraña persona, quiste de piedra, situada entre esta muchacha roja y azul y esta Penélope. Me vas a devolver la mirada y tus labios insistirán en ofrecerme recuerdos que ya no necesitas. "Eras tan raro... ¿recuerdas?" Me dijiste. "Cuando me muera antes que tú, que alguien te dé mi más sentido pésame" Te respondí.
Ays, pues por supuestísimos, si me dices cómo quedé en la otra partida; y ya te digo que como me arranques pestañas, verás tú, jummmmm, la qe tenemos jajajaja
que bueno que te pasaras por los chapines, me gusta mucho tu blog ^^
(Y qué casualidad, "Nocturnidad y alevosía" era una de las partes originarias del libro que saqué hace unos meses, con el tiempo lo cambié, pero me encantaba el título)
...Recuerdas cuando me decías que yo para ti representaba el final del miedo, el retorno, el cuerpo, como una tinaja con asideros o una lejana nube, ave de agüeros absolutos, penumbras en otoño, encendida carne, sonrisas en tus ingles, mano presentida que te hacía necesario a la que incluso en momentos de odio y premonición de homicidio, bajo el maquillaje de los días, hubieras querido retener porque, ¿quién, quién no teme perder incluso lo que no quiere? Eres una muchacha roja pero escribiste mucho tiempo en azul. Lejana pero tierna en el recuerdo. Ahora vas a exigirme que te recuerde antes que de que fueras otra persona, una extraña persona, quiste de piedra, situada entre esta muchacha roja y azul y esta Penélope. Me vas a devolver la mirada y tus labios insistirán en ofrecerme recuerdos que ya no necesitas. "Eras tan raro... ¿recuerdas?" Me dijiste.
ResponderEliminar"Cuando me muera antes que tú, que alguien te dé mi más sentido pésame" Te respondí.
a mí me gusta más mirar las pestañas desde lejos, sin tocar.
ResponderEliminar(medio litro
de té caliente)
No negaré que suena interesante jugar...
ResponderEliminarQuien pone las reglas??? ;)
ResponderEliminarBesos adormecidos
Juego :)
ResponderEliminar(Ya me irás contando las reglas)
(O no, da igual).
Besos desarreglados.
echado a soñar,
ResponderEliminarG.
Ays, pues por supuestísimos, si me dices cómo quedé en la otra partida; y ya te digo que como me arranques pestañas, verás tú, jummmmm, la qe tenemos jajajaja
ResponderEliminarbesos
aparte que las pestañas no te sirven si se las arrancas a la gente, lo sepas!!!
ResponderEliminarsalamanca, sí, es una posibilité con muuuuuuuuucho peso, ya ando buscando resis y tal :)
ResponderEliminarte informaré de mis progresos y esas cosillas,
muá!
¿Y de qué va el juego ése, si se puede saber? :)
ResponderEliminarYo juego =)
ResponderEliminar(te doy un poco del bizcocho de limón por haberte pasado por mi blog)
Los juegos siempre son divertidos (y si hay globos como en la foto, más). ¿De qué irá este?
ResponderEliminar(:
Dale al play, que tengo el joystick en la mano.
ResponderEliminarNo hay nada en el mundo tan rojo como tu boca...
ResponderEliminarque bueno que te pasaras por los chapines, me gusta mucho tu blog ^^
(Y qué casualidad, "Nocturnidad y alevosía" era una de las partes originarias del libro que saqué hace unos meses, con el tiempo lo cambié, pero me encantaba el título)
Un saludo.
juguemos, pues.
ResponderEliminarSólo recuerda que yo juego mejor.
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