“Estoy enamorado de una gilipollas” me dijiste y yo me reí
desviando la mirada y pensando en que tal vez vieras las cosas como realmente
son y no como las aparento, pensando en que el atardecer rosáceo de fondo se mueve a
ciento sesenta kilómetros y que nosotros estamos dentro, pensando que tienes
los ojos más bonitos del mundo y que se sacuden con cada cicatriz de mi cuerpo.
Me das ganas de nacer de nuevo. De tener la piel ingenua,
los ojos brillantes, las uñas limpias, la boca torpe, el sexo ignorante.
Toda
yo inédita para ti y estrenar la vida contigo.
Quizá así por fin pueda mirarte y no preguntarme cuándo te
vas a ir...
*"Vlada". Evru, 2005. Imagen digital sobre aluminio siliconado.
Piel ingenua...preciosura de octubre...
ResponderEliminarA veces se consigue nacer de nuevo...
ResponderEliminarOjalá lo consigas.
Besos oscuros.
es un texto hermoso, la descripción es muy tierna, el deseo que supongo en ella, es algo que he anhelado, encantado de poder conocerte. Leonard
ResponderEliminar"Me das ganas de nacer de nuevo."
ResponderEliminarmuy bueno salomé!
(gracias por tus palabras)
Empezar de cero aparece el casi siempre el primero de la lista de mis deseos. Pero no es del todo cierto, me gustaría empezar de cero sabiendo todo lo que sé ahora, de esa forma podría escapar de mis errores y, sobre todo, de mi estupidez.
ResponderEliminarCoincido con los demás, ese deseo, más que de empezar de 0, de no tener ninguna experiencia, sería el mejor de los regalos. Para los dos. Una vez alguien dijo que envidiaban a los que no habían leído El Señor de los Anillos porque todavía podían hacerlo por primera vez. Naturalmente, esta frase es aplicable a casi cualquier cosa especial, incluido, cómo no, entregarse a alguien.
ResponderEliminarSi no dejáis de decir cosas profundas, os mato.
ResponderEliminarBueno, bueno, mi turno.
La Fosa de las Marianas.
Ahí lleváis.
: )
Inevitable el preguntarse cuándo se irá, ¿verdad?
ResponderEliminarEl sexo ignorante....
ResponderEliminarQue gran texto Salomé, un placer encontrarte
A mí siempre me da por pensar que me he enamorado de un gilipollas. De hecho, ahí reside todo el encanto.
ResponderEliminarA veces también me gustaría poder nacer de nuevo y recomenzar.
ResponderEliminarUn beso, bonita.
Confieso que estuve cerca de treinta segundos mirando la imagen embobada antes de poder concentrarme en el texto.
ResponderEliminarY claro, una vez que lo hice, lo que me embobó fueron tus palabras.
Genial.
"Me das ganas de nacer de nuevo. De tener la piel ingenua, los ojos brillantes, las uñas limpias, la boca torpe, el sexo ignorante.
ResponderEliminarToda yo inédita para ti y estrenar la vida contigo."
A mí me han dado vida éstas palabras.
Qué placer pasearme de vez en cuando por aquí, porque hay cosas que me llegan al alma y que pena que se me olvide.
dar a luz.
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